En Sacramento, California, cientos de manifestantes que coreaban “Las vidas afroestadounidenses importan” bloquearon una autopista interestatal y retrasaron un partido de baloncesto de la NBA el jueves, en protesta por el asesinato a manos de la policía de Stephon Clark, un afroestadounidense de 22 años y padre de dos hijos que estaba desarmado, en el patio de su casa, cuando fue abatido por dos oficiales de policía el domingo. Las manifestaciones se producen al tiempo que el jefe de policía de Sacramento, Daniel Hahn, afirmó que no sabe por qué los oficiales que mataron a Clark desactivaron la grabación de audio de sus cámaras policiales tras el tiroteo. Las manifestaciones del jueves retrasaron el inicio de un partido entre Sacramento Kings y Atlanta Hawks, ya que sólo una fracción de las personas que tenían entradas pudieron llegar al estadio. Luego, el propietario del equipo, Vivek Ranadivé, pronunció unas palabras en solidaridad con las manifestaciones.
Vivek Ranadivé expresó: “Estamos aquí ante ustedes: las personas mayores, las jóvenes, las afroestadounidenses, las blancas, las de color. Y todos estamos unidos en nuestro compromiso. Reconocemos que esta situación no es normal, y trabajaremos muy duro para unirlos a todos y hacer de este un mundo mejor, empezando por nuestra propia comunidad”.