El director de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por su sigla en inglés), Scott Pruitt, se dirige al Capitolio el día de hoy, donde será interrogado acerca de una serie de investigaciones que lleva a cabo el inspector general sobre sus hábitos de gasto y sus vínculos con integrantes del lobby de la industria. Pruitt enfrenta más de media docena de acusaciones, como por ejemplo que pagó sólo 50 dólares por noche para vivir en un apartamento de Capitolio Hill vinculado con un importante lobista de Washington cuyo estudio representa a varias empresas del sector de los combustibles fósiles. Pruitt luego mintió y afirmó que el lobista no tenía negocios antes de la EPA. Pruitt encargó la instalación de una cabina telefónica con aislación acústica por un valor de 43.000 dólares en su oficina, lo que según un órgano de control del gobierno violó las leyes de gastos. Además, destinó 3 millones de dólares del presupuesto de la Agencia para financiar su personal de seguridad, que incluye 18 agentes a tiempo completo. Luego bajó de categoría a los funcionarios que cuestionaron el uso de estos fondos y despidió a un agente de seguridad que se negó a encender la sirena de emergencia de su vehículo para atravesar un embotellamiento en Washington DC. Es habitual que Pruitt viaje en primera clase o clase ejecutiva debido a que era comúnmente confrontado por clientes que viajaban en clase económica enojados por sus políticas, según afirmó un funcionario de la EPA a POLITICO. Cuando viaja, Pruitt se queda en hoteles de lujo y sus gastos por viajes internacionales ascienden a las seis cifras. Y mientras se desempañaba como fiscal general de Oklahoma, Pruitt usaba una dirección de correo electrónico privada para tratar asuntos de Estado; luego le dijo al Comité Ambiental del Senado que no había hecho esto.
Director de la Agencia de Protección Ambiental enfrenta preguntas de legisladores sobre escándalos éticos
Titular26 Abr. 2018