La Organización de las Naciones Unidas continúa advirtiendo sobre la crisis humanitaria que empeora cada día en la República Democrática del Congo. La ONU Sostiene que cuatro millones y medio de personas han sido desplazadas y dos millones de niños enfrentan una desnutrición severa en medio de una ola de violencia ante el intento del presidente Joseph Kabila de conservar el poder, un año después de haber finalizado su mandato. Las siguientes son las palabras de Filippo Grandi, el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, quien apela a aumentar la ayuda internacional.
Filippo Grandi expresó: “Quiero hacer un llamado urgente a la comunidad internacional. África está muy lejos de los países ricos. Muchos de estos refugiados no caminarán miles de kilómetros y cruzarán el mar para llegar a Europa y recordarles su existencia, como hicieron los sirios, como hicieron otros. Ellos se quedan aquí, sufren aquí, pero también necesitan ayuda”.
Se espera que las Naciones Unidas lleven a cabo la próxima semana una importante conferencia de donantes para recaudar fondos para la República Democrática del Congo. El Gobierno del presidente Kabila está boicoteando el evento y niega que su país enfrente una crisis humanitaria.