Mientras tanto, disminuyen las esperanzas en que al menos cinco ciudadanos estadounidenses que están prisioneros en Irán sean liberados. Sus defensores afirman que están retenidos por cargos falsos. Los familiares de los prisioneros sostienen que la decisión del presidente Trump de retirar a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán probablemente incite al país asiático a empeorar las duras condiciones de encarcelamiento. Este es Babak Namazi, cuyo padre Baquer y su hermano Siamak recibieron condenas de 10 años por “colaborar con un poder hostil”, es decir, con Estados Unidos.
Babak Namazi expresó: “Nada te prepara para el horror de que te quiten no a uno, sino a dos miembros de tu familia. La sensación de abatimiento, la sensación de absoluta confusión, de estar atrapado en una situación en la que tus seres queridos están en horribles condiciones, que han sido retenidos en situaciones deplorables. Y todo eso es muy injusto e inexplicable”.