En otras noticias relacionadas con prisiones, docenas de manifestantes se congregaron el jueves frente al Centro Metropolitano de Detención del distrito de Brooklyn, en Nueva York. Durante la ola de frío de la semana pasada, 1.600 prisioneros estuvieron encerrados varios días, sin calefacción ni electricidad, y sin recibir comidas calientes. La protesta se produjo un día después de que una jueza visitara la prisión para inspeccionar las condiciones de la cárcel.
Samantha Johnson expresó: “Mi nombre es Sam Johnson. Estoy aquí en apoyo y solidaridad para los detenidos en el Centro Metropolitano de Detención. También estoy aquí para demostrar que el comportamiento opresor que está ejerciendo el Gobierno ahora mismo no puede ser aceptado, y que los ciudadanos estamos aquí para responsabilizarlo. Cuando vinimos al tribunal el martes, entendimos que el Gobierno iba a hacer lo que siempre hace. Iban a limpiar la cárcel, iban a mostrarles que las celdas están en perfectas condiciones. Y luego, cuando pasara la cortina de humo, volverían al plan original de perjudicar a los afroestadounidenses y a las personas de color, de no reconocerlos, de pensar que son seres humanos inferiores”.