Una nueva investigación llevada a cabo por la organización sin fines de lucro Public Accountability Initiative (Iniciativa de responsabilidad pública, español) revela que grandes empresas contaminantes e instituciones financieras financian también a poderosos grupos policiales en todo Estados Unidos. Las empresas incluyen a Chevron, Shell y Wells Fargo, que destinan dinero a fundaciones que trabajan para avanzar la práctica policial en ciudades como Seattle, Chicago, Washington, Nueva Orleans y Salt Lake City. Carroll Muffett, del Centro de Derecho Ambiental Internacional, afirmó: “Este informe deja duramente al descubierto la forma en que la violencia policial y el racismo sistémico se entrecruzan con la crisis climática”.
Reciente informe demuestra vínculos financieros entre empresas de combustibles fósiles y la Policía de EE.UU.
Titular28 Jul. 2020