En el Caribe, una densa capa de ceniza cubrió San Vicente y las Granadinas después de que un volcán que había estado inactivo durante mucho tiempo entrara en erupción el viernes de manera repentina.
Robertson Henry: “La gente mira hacia arriba y hay una enorme columna de ceniza suspendida en el cielo, silenciosa, mortal, espantosa y ominosa”.
La erupción provocó cortes de agua y luz en todo San Vicente, y más de 16.000 personas evacuaron sus hogares. No se han registrado muertos ni heridos, pero los geólogos advierten que el volcán todavía podría desencadenar “flujos piroclásticos” mortales de lava, cenizas y gases volcánicos.