En Estados Unidos, en el estado de Florida, el periódico Miami Herald ha publicado imágenes impactantes que muestran cómo guardias penitenciarios dejaron que Craig Ridley, un recluso de Florida de 62 años, muriera de hambre y como producto de las lesiones después de fracturarle el cuello en 2017. El video tomado por un funcionario de la prisión poco después de la grave lesión, revela que los guardias hicieron caso omiso de las protestas de Ridley, en las que les decía que tenía el cuello roto y que no se podía mover.
Guardia penitenciario: “Ayudé al sargento Nettles y coloqué a un recluso en el suelo aquí mismo. En este momento el recluso se niega a caminar y acudir a la asistencia médica para realizarse un examen físico posterior al uso de la fuerza y previo a su traslado a una celda de confinamiento. Tenemos una silla de ruedas disponible. […] ¿Qué tiene? Es posible que necesite su ayuda, señor”.
Los guardias acusaron repetidas veces a Ridley de estar fingiendo su lesión y subieron su cuerpo inerte a una silla de ruedas. Craig Ridley murió hace cinco años, el 12 de octubre de 2017, intubado e incapaz de comunicarse.