En Estados Unidos, dos jueces dieron un duro golpe la semana pasada a los esfuerzos liderados por los republicanos para intimidar a los votantes y suprimir el derecho al voto. Un tribunal del condado de Miami-Dade del estado de Florida retiró el viernes los cargos de fraude electoral contra un hombre que fue arrestado en agosto por policías a cargo de la Oficina de Delitos Electorales y de Seguridad del gobernador republicano Ron DeSantis. Robert Lee Wood había sido condenado previamente por un delito grave, pero no sabía que, según la ley de Florida, eso le impedía ejercer su derecho al voto. Por otra parte, una jueza del estado de Texas desestimó un cargo contra Hervis Earl Rogers, quien estaba en libertad condicional cuando esperó más de seis horas para votar en las elecciones primarias de 2020 en la ciudad de Houston. En Texas, emitir un voto mientras se cumple una sentencia, incluida la libertad condicional, se castiga con hasta 20 años de prisión.
En otras noticias electorales, la oficina del sheriff del condado de Maricopa, en el estado de Arizona, está investigando un posible acto de intimidación de votantes después de que al menos dos personas que llevaban máscaras y poseían equipo táctico acamparan cerca de un centro de votación anticipada el viernes.