En Sudán, las fuerzas de seguridad lanzaron gas lacrimógeno y granadas de aturdimiento el lunes para dispersar a miles de personas que protestaban contra el Gobierno militar. La protesta, que tuvo lugar en la ciudad capital, Jartum, se produjo en el tercer aniversario del inicio del levantamiento que derrocó al autoritario presidente Omar al-Bashir. La protesta se suscitó dos semanas después de que la junta militar gobernante de Sudán y los grupos prodemocráticos firmaran un acuerdo destinado a preparar gradualmente al país para que se celebren las primeras elecciones y se realice la transición a un Gobierno civil tras el golpe de Estado militar que tuvo lugar en octubre de 2021. Los manifestantes que salieron a las calles el lunes rechazaron ese acuerdo y dijeron que dejaría a los golpistas en el poder por al menos dos años más.
Manifestante: “La revolución continuará y no se detendrá. Nuestra demanda básica es vivir una vida digna en este país, y no renunciaremos a nuestros derechos de ninguna manera. Incluso si se firmaran acuerdos entre políticos y soldados, esto no es lo que el pueblo sudanés quiere”.