En Estados Unidos, en el estado de Michigan, la familia de Patrick Lyoya exige que el agente de policía blanco de la localidad de Grand Rapids que mató al refugiado congoleño de 26 años sea destituido de su cargo y enfrente cargos penales. Las autoridades de Grand Rapids aún no han revelado la identidad del oficial, a quien se ve en un video sacando de su funda la pistola de servicio y disparando una bala fatal en la cabeza de Lyoya después de un forcejeo. El padre de Patrick, Peter Lyoya, dijo a través de un intérprete que él y su familia habían escapado de la guerra y la persecución en la República Democrática del Congo solo para ver cómo Patrick es asesinado “como un animal” por un oficial de policía de Michigan.
Peter Lyoya: “Mi corazón está destruido. Yo no sabía que en este país hay un genocidio. No lo sabía. No sabía que aquí en Estados Unidos se puede matar a alguien al estilo de las ejecuciones”.