Funcionarios del Kremlin rechazaron las acusaciones de que soldados rusos mataron a civiles en el norte de Ucrania, y declararon que se fabricaron imágenes de tumbas y cadáveres para difamar a Rusia. El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, dijo el lunes que los líderes estadounidenses deberían examinar su propia conciencia antes de acusar al presidente Vladimir Putin de crímenes de guerra.
Sergey Lavrov: “En primer lugar, ¿qué hay de los muchos políticos estadounidenses que originaron la guerra en Irak con pretextos bien conocidos, que también devastaron Libia acompañados de sus socios de la OTAN, que invadieron Siria? No está del todo limpia la conciencia de esos políticos”.
Los comentarios de Lavrov se produjeron al tiempo que los lazos diplomáticos entre Rusia y los miembros de la OTAN continúan deteriorándose. Funcionarios alemanes declararon el lunes a 40 diplomáticos rusos como “personas no gratas” y los expulsaron de Alemania. Francia anunció una medida similar que afecta a 35 diplomáticos rusos.