En el Mediterráneo, la organización Médicos Sin Fronteras afirma que rescató a 440 inmigrantes después de responder este martes a una llamada de socorro de una embarcación que se encontraba en apuros cerca de la costa de Malta. Los pasajeros de la embarcación procedían de Siria, Pakistán, Bangladesh, Egipto, Somalia y Sri Lanka, y 30 de ellos eran menores de edad. Mientras tanto, organizaciones de defensa de los derechos humanos han criticado la última medida antiinmigrante del Gobierno del Reino Unido, luego de que alquilara una enorme barcaza donde dice que 500 solicitantes de asilo pueden ser alojados mientras esperan que sus casos se resuelvan. Estas fueron las palabras expresadas por el primer ministro británico, Rishi Sunak.
Primer Ministro Rishi Sunak: “Estamos proponiendo sitios alternativos, como la embarcación que hemos anunciado hoy. Esto nos ahorrará dinero y reducirá la presión sobre los hoteles, como parte de nuestro plan para detener los barcos. También vamos a presentar al Parlamento una nueva ley que garantizará que las personas que lleguen aquí de manera ilegal no puedan permanecer en el país. Podremos detenerlas y luego trasladarlas rápidamente a sus países de origen, si eso es seguro, o a un tercer país alternativo, como Ruanda”.
La delegación de Amnistía Internacional en el Reino Unido calificó el plan como una “crueldad ministerial”.
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