En la provincia canadiense de Alberta, los meteorólogos dicen que las lluvias y las temperaturas más frescas deberían ayudar a los bomberos a controlar una temporada primaveral de incendios forestales récord, en la que ya han ardido más de 900.000 hectáreas. El humo de los incendios ha provocado alertas sobre la calidad del aire en diferentes estados de Estados Unidos, incluidos Colorado, Idaho, Montana y Utah.
El lunes, la Organización Meteorológica Mundial informó que las condiciones climáticas extremas han causado unos dos millones de muertes desde 1970, de las cuales más del 90% han ocurrido en los países del Sur Global.