El Fiscal General Michael Mukasey nombró a un Fiscal Especial para que continúe una investigación sobre si la mala conducta política provocó el despido de nueve fiscales de Estados Unidos. La designación tuvo lugar a pedido de una amplia investigación del Departamento de Justicia. Los investigadores señalaron al Fiscal General Alberto Gonzáles por su conducta en los despidos, lo acusaron de “abdicar” a su responsabilidad y cuestionaron sus declaraciones públicas erróneas y evasivas. El presidente del Comité Judicial del senado Patrick Leahy advirtió al Presidente Bush que no haga mal uso de su poder de perdón para beneficiar a funcionarios vinculados con el escándalo.
El senador Leahy dijo: “La prueba en nuestra investigación en el Comité Judicial y el informe hoy muestra que Karl Rove y otros, entre los altos cargos de la Casa Blanca, estuvieron involucrados en los despidos, y aparentemente se centraron en el impacto político de los procesamientos federales. No creo que se le deba permitir a la Casa Blanca evadir la responsabilidad”.