Concluyó en Washington la cumbre internacional sobre seguridad nuclear con una promesa de eliminar o salvaguardar todos los materiales nucleares vulnerables en un plazo de cuatro años. El Presidente Barack Obama anunció la meta durante su discurso de clausura.
El mandatario estadounidense declaró: “Siento una gran satisfacción porque todos los países representados aquí respaldaron la meta que esbocé en Praga hace un año de asegurar todos los materiales nucleares vulnerables del mundo en cuatro años. Esta es una meta ambiciosa y no nos hacemos ilusiones de que sea fácil, pero la urgencia de la amenaza y las consecuencias catastróficas que podría tener incluso un solo acto de terrorismo nuclear demandan un esfuerzo que es a la vez audaz y pragmático, y es una meta que se puede alcanzar”.
La declaración final de la cumbre, en la que participaron 47 países, también esboza un plan de acción voluntaria para combatir el terrorismo nuclear y promete la realización de mayores esfuerzos para impedir que actores no estatales desarrollen armas nucleares. Sin embargo, pasa por alto la cuestión de si se debe seguir produciendo uranio y plutonio para armamento, y tampoco establece compromisos legalmente obligatorios.