BP logró interrumpir, al menos provisoriamente, el flujo de petróleo que mana del pozo y se vierte en las aguas del Golfo de México, por primera vez desde la explosión de la plataforma Deepwater Horizon ocurrida hace 90 días. El jueves, BP logró interrumpir la pérdida de petróleo al cerrar con éxito la válvula de una tapa de contención colocada sobre el pozo averiado. Se seguirán realizando pruebas para determinar si la presión es lo suficientemente alta como para mantener a la tapa en su lugar o si será necesario volver a abrir el pozo y colocar otro dispositivo para taparlo. Hasta ahora, se han vertido 184 millones de galones de petróleo en las aguas del golfo. El Oficial de Operaciones Principal de BP, Doug Suttles, recibió las noticias con discreto entusiasmo.
Suttles declaró: “Es una señal alentadora. En un par de días más quizás sea más alentadora aún. Pero no celebremos. Si uno habla con la gente que vive allí, ‘celebración’ es una mala palabra. Pero podría ser que estemos muy cerca, ya sea a través de esta actividad o de los pozos de descongestionamiento, del punto en que todos empecemos a sentir que estamos saliendo del mal paso, y que dimos un paso importante. Pero no, no creo que este sea el momento de celebrar”.