Tras la masacre de Houla, el enviado de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, realizó un viaje de emergencia a Damasco para reunirse con Assad. Annan afirmó que después de un año de conflicto, Siria ha alcanzado “un punto de inflexión”.
Kofi Annan dijo: “Le manifesté al Presidente Assad mi opinión de que el plan de seis puntos no ha sido aplicado como debe ser. Estamos en un punto de inflexión. El pueblo sirio no tiene un futuro, actualmente su futuro esta relacionado al derramamiento de sangre y a la división. Sin embargo, actualmente las masacres siguen sucediendo y siguen habiendo abusos”.