Un ex superintendente de una mina de carbón de Virginia Occidental donde murieron 29 trabajadores a consecuencia de una explosión fue condenado a casi dos años de cárcel. Gary May se había declarado culpable de conspirar para estafar al gobierno de Estados Unidos y admitió su responsabilidad en alertar a los mineros sobre las inspecciones de seguridad, falsificar registros e inutilizar un detector de metano. Los reguladores llegaron a la conclusión de que Massey Energy no mantuvo los estándares de seguridad básicos en la mina Upper Big Branch y permitió la acumulación de polvo de carbón en la mina, que se incendió a consecuencia de una chispa producida por los equipos defectuosos. La explosión de 2010 representó la peor catástrofe en 40 años de la minería de carbón en Estados Unidos.
Supervisor de Massey Energy condenado a 21 meses de cárcel por encubrimiento de fallas de seguridad que condujeron a desastre minero
Titular18 Ene. 2013