Defensores de los derechos LGTB se concentraron en Uganda el lunes para jurar oponerse a la nueva legislación contra la homosexualidad aprobada en ese país. El Parlamento de Uganda aprobó la semana pasada una medida que impone una condena de cadena perpetua a quienes cometan repetidos actos homosexuales. La legislación criminaliza también el hecho de no denunciar a las personas homosexuales. La activista de Uganda Kasha Jacqueline advirtió que impugnará la ley ante la justicia.
Jacqueline expresó: “Si no lo logramos ante los tribunales de Uganda, tendremos que ir ante el tribunal africano. Y si no lo logramos ante el tribunal africano, tendremos que ir ante un tribunal internacional. Porque la razón por la que no estábamos ya ante un tribunal cuando fue aprobada la ley es que no se puede impugnar algo que aún no ha sido aprobado. Cuando se presentó ante el Parlamento, no podíamos impugnarla porque no se puede impugnar lo que no está ya aprobado. Pero ahora que fue aprobada, nos ha hecho más fuertes, nos abre el camino, nos acorta el camino para presentarnos ante un tribunal constitucional. Y para nosotros eso es algo positivo que hemos visto en todo esto, a pesar de todos los reveses”.
Varios evangélicos estadounidenses han sido vinculados al fervor anti LGTBQ en Uganda; incluso se ha informado que algunos colaboraron en la redacción de la ley recientemente aprobada.