Birmania comenzó a liberar presos políticos luego de que el gobierno anunciara una amnistía de fin de año. El Presidente birmano Thein Sein había prometido liberar a todos los presos políticos a fines de 2013. Se espera que la amnistía incluya a unos 40 presos políticos y a otras 200 personas que se enfrentan a juicios o investigaciones conforme a leyes que tienen como objetivo a los activistas. Entre los liberados hoy se encuentra Yan Naing Tun, que cumplía una condena de siete meses por liderar una marcha sin autorización. Naing Tun criticó al gobierno tras su liberación.
Yan Naing Tun expresó: “Aunque [el gobierno] diga que esto es una amnistía, para nosotros no es una amnistía. Están intentando ocultar la debilidad de la legislatura al hacer esto. Sin embargo, respeto al Sr. Presidente por haber cumplido con su promesa, ya que nunca antes había cumplido sus promesas”.