Dos niños resultaron gravemente heridos luego de que un compañero de clase abriera fuego en una secundaria de Roswell, Nuevo México. El agresor, de doce años de edad, portaba una escopeta. Las víctimas fueron un niño de once años de edad que se encuentra en estado crítico y una niña de doce años cuyo estado es de gravedad. La gobernadora de Nuevo México Susana Martínez informó a la prensa sobre el ataque.
Martínez comunicó: “El estudiante de la Escuela Secundaria Berrendo ingresó a la institución esta mañana y mientras los estudiantes se reunían en el gimnasio por las condiciones climáticas, este individuo abrió fuego contra las personas que estaban en el gimnasio. El agresor fue detenido rápidamente por un miembro del personal que caminó directamente hacia él y le pidió que bajara el arma, lo cual hizo. Recibió apoyo de un teniente de la policía que traía a su propio hijo”.
Este tiroteo es el tercero que tiene lugar en una secundaria estadounidense en los últimos cuatro meses, con fatales incidentes acaecidos en Nevada en octubre y en Colorado el mes pasado. Se trata además de al menos el 26º tiroteo que tiene lugar en una institución educativa en poco más de un año, desde la masacre de Newtown en diciembre de 2012.