La cifra de víctimas fatales a causa del desprendimiento de tierra que tuvo lugar en el estado de Washington el mes pasado ha alcanzado las 41, con dos personas que permanecen aún desaparecidas. El martes, el Presidente Obama recorrió la zona y se reunió con los familiares de las víctimas.
Obama expresó: “Aún hay familias que buscan a sus seres queridos. Son familias que han perdido todo y que tienen ante ellas un camino difícil de recorrer. Es por eso que quería venir aquí para hacerles saber que el país piensa en ustedes y que lo ha hecho durante toda esta tragedia”.
Funcionarios del condado aparentemente estarían evaluando una prohibición de seis meses a la realización de nuevas construcciones en zonas propensas al desprendimiento de tierra. Proyectos de construcción fueron aprobados previamente a pesar de un informe de 1999 del Cuerpo de Ingenieros del Ejército que advertía acerca de “la probabilidad de una gran falla catastrófica”.