Mientras tanto, en Louisiana, el Tribunal de Apelaciones del quinto circuito permitió que entrara en vigor una ley contra el aborto que podría provocar el cierre de casi todas las clínicas del estado que practican interrupciones del embarazo. Louisiana es uno de varios estados que aprobó leyes que exigen a los proveedores de abortos obtener privilegios de admisión en el hospital más cercano. Esos privilegios son a menudo imposibles de obtener para las clínicas que practican abortos, debido a que existe un posicionamiento contrario al aborto o porque no admiten suficientes pacientes para cumplir con el mínimo exigido por un hospital. El abogado del Centro para los Derechos Reproductivos David Brown dijo el jueves que el fallo probablemente provocará el cierre de todas las clínicas, excepto una.
Brown afirmó: “Cuando la ley fue aprobada había cinco clínicas de aborto en todo el estado que ofrecían servicios a las mujeres. Tres de esas clínicas han cerrado porque no cumplían el requisito de privilegios de admisión que el quinto circuito permitió que entrara en vigor anoche. La cuarta clínica está pendiendo de un hilo, tiene un médico que deberá dejar la clínica a menos que obtenga una excepción inmediata de la Corte Suprema. De esta manera la decisión de ayer del quinto circuito nos lleva de cinco clínicas a una”.
El Centro por los Derechos Reproductivos sostuvo que procurará ayuda de emergencia de la Corte Suprema. La decisión tiene lugar una semana antes de que se presenten argumentos en la Corte Suprema el miércoles acerca de otro fallo del Tribunal de Apelaciones del quinto circuito que confirmó las restricciones contra el aborto en Texas, entre ellas una norma similar sobre los privilegios de admisión que provocó el cierre de alrededor de la mitad de las 40 clínicas de ese estado.
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