El gobierno de Obama ha disminuido las restricciones a los viajes y el comercio con Cuba, apenas días antes de que Obama se convierta en el primer presidente de Estados Unidos en funciones en visitar el país en 88 años. Las nuevas medidas permiten a los estadounidenses viajar a Cuba si planifican realizar actividades educativas, como interactuar con ciudadanos cubanos o visitar museos. También permiten a los cubanos tener cuentas bancarias en Estados Unidos y percibir salarios de empresas estadounidenses, así como utilizar dólares estadounidenses en transacciones con Cuba. El portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest dijo que el cambio podría promover reformas económicas en Cuba.
Earnest declaró: “También podría ejercer más presión en el gobierno cubano para llevar a cabo reformas en la economía cubana. Todo eso será bueno y todo eso estará al servicio de los objetivos políticos básicos que hemos establecido desde un comienzo. Quisiera simplemente señalar que esos también eran los objetivos de las políticas que el gobierno estadounidense priorizó durante 50 años de bloqueo de Cuba y de intentos de aislar a la nación cubana”.