En Francia, más de 50.000 personas se lanzaron a las calles el jueves, obstruyendo calles y formando barricadas en torno a escuelas, al tiempo que el Gobierno francés evitó por escaso margen un voto de desconfianza de la Asamblea Nacional por las polémicas reformas laborales del presidente François Hollande. Quienes se oponen al proyecto de ley estuvieron a escasos 40 votos de los 288 necesarios para anular las reformas. Las polémicas reformas laborales avanzaron hace dos días por medio de una facultad utilizada con poca frecuencia. Las propuestas han suscitado manifestaciones masivas de estudiantes y sindicatos a lo largo y ancho de Francia. El movimiento ha sido denominado “Nuit debout” o “Noche en pie”. El jueves, efectuó declaraciones el secretario general del sindicato CGT, Philippe Martínez.
Philippe Martínez expresó: “Lo más importante es el sentir de la gente. No ha habido diálogo con los sindicatos, porque el proyecto se nos impuso y, una vez más, la democracia ha sido dejada de lado en la Asamblea Nacional. Considero que para un gobierno que habla mucho acerca del diálogo, del debate, bueno, nos está mostrando cuál es su idea de diálogo: avanzar por la fuerza, intentar atemorizar a los trabajadores y a los jóvenes, a la población. Deberían mirar hacia las urnas, porque más de 70% de la población de este país está en contra de este proyecto de ley”.