En Japón, decenas de miles de personas se congregaron en la isla de Okinawa en demanda del retiro de las bases militares de Estados Unidos. Activistas afirman que 65.000 personas se hicieron presentes en la que describieron como la mayor manifestación de protesta que ha tenido lugar en 20 años contra la presencia militar estadounidense. Las manifestaciones estallaron luego de que un exinfante de marina que se desempeñaba como contratista civil en una base estadounidense fuera acusado de violar y asesinar a una mujer de 20 años de edad. El padre de la víctima pidió el retiro de todas las bases de Estados Unidos en Okinawa, que alberga a unos 26.000 soldados estadounidenses. En la marcha del sábado, Lía Camargo sostuvo que los soldados estadounidenses también deberían rendir cuentas por los delitos que cometen.
Lía Camargo expresó: “Las consignas son algo así como ‘saquen las bases de aquí’, pero, en mi opinión, no es tan simple. Considero que hay que asegurarse de que los soldados [estadounidenses] rindan cuentas si cometen un delito con la misma severidad que cuando una persona japonesa comete ese mismo delito”.