Hubo manifestaciones el lunes en la oficina de la Junta de Libertad Condicional del estado de Nueva York en Albany, luego de que un recluso fuera hallado sin vida en la Correccional Fishkill el jueves. Según se informó, John Mackenzie, de 70 años de edad, se habría colgado días después de que le fuera negada la libertad condicional. MacKenzie estaba en prisión desde 1975 después de haber recibido una sentencia de 25 años a cadena perpetua por haber matado a un agente de policía durante un robo. Tuvo derecho a libertad condicional por primera vez en el año 2000. A principios de este año, la Corte Suprema del estado declaró a la Junta de Libertad Condicional en desacato por no reconocer su arrepentimiento y su rehabilitación. Las siguientes son palabras de la abogada de MacKenzie, Kathy Manley, al leer una carta de su hija, Danielle, durante la manifestación de protesta del lunes.
Kathy Manley leyó: “Muchas personas han recibido una influencia positiva de mi padre y de toda la gran labor que desarrolló mientras estaba encarcelado, lo que fue ignorado por la Junta de Libertad Condicional. A pesar de las dificultades, John MacKenzie encontró su camino a la rehabilitación enfrentándose a la adversidad. Se sobrepuso e hizo lo correcto. La Junta de Libertad Condicional, no. No reconocieron su arrepentimiento. Prefirieron ignorar su rehabilitación. En lugar de hacerlo, se concentraron en la negatividad, en el castigo y el odio. A consecuencia de ello, deberían presentarse cargos contra la Junta por la muerte de mi padre. ¡Procurémoslo!”.
Más de 9.500 personas mayores de 50 años de edad se encuentran detenidas en prisiones de Nueva York. Dos tercios de ellas tienen derecho a libertad condicional.
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