Hoy en Irak, las fuerzas iraquíes que reciben respaldo de Estados Unidos lucharon contra el autoproclamado Estado Islámico (ISIS) en las afueras de la Ciudad Vieja de Mosul, al tiempo que un alto general iraquí afirmó que sus tropas estaban retrasando su ofensiva para evitar más muertes civiles. El combate se produjo después de que oficiales iraquíes declararan el miércoles haber retirado casi 300 cadáveres del sitio donde un ataque aéreo perpetrado el 17 de marzo enterró a civiles que buscaban refugio de la violencia. El comandante estadounidense en la lucha contra el ISIS reconoció que hay “por lo menos una posibilidad razonable” de que la coalición dirigida por Estados Unidos sea responsable de las muertes.
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