El miércoles, el FBI declaró tener “graves preocupaciones” sobre los planes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de hacer público un documento de cuatro páginas escrito por el presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, el republicano Devin Nunes, que pretende demostrar que el FBI incurrió en abuso de poder cuando comenzó a vigilar a Carter Page, asesor de campaña de Trump, en 2016 debido a sus negociaciones con Rusia. Los partidarios de Trump afirman que el memorándum brinda pruebas de que la investigación del FBI estuvo politizada desde un principio, en parte porque el FBI obtuvo la aprobación para las escuchas tras citar un dossier financiado por los partidarios de Hillary Clinton.
Se espera que el memorándum responsabilice al vicefiscal general Rod Rosenstein, que además es el único funcionario con autoridad para despedir al fiscal especial Robert Mueller. A principios de esta semana, los republicanos que integran el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes votaron a favor de desclasificar el memorando siguiendo las líneas de su partido, ya que el documento se había convertido en un grito de guerra para Trump y sus partidarios. En una declaración muy inusual emitida el miércoles, el FBI señaló: “[A la institución] se le dio una oportunidad limitada para revisar este memorándum el día antes de que el comité votara su publicación. Tal como lo expresamos durante nuestra revisión inicial, tenemos graves preocupaciones respecto de omisiones de hechos que afecten fundamentalmente la precisión del memorándum”. El miércoles, el demócrata de mayor rango en el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, se hizo eco de esas preocupaciones.
Adam Schiff expresó: “Esto no tiene que ver con los hechos. Se trata de una narrativa que el presidente quiere publicar, una narrativa engañosa para perjudicar al FBI, para perjudicar al Departamento y, en última instancia, para perjudicar a Bob Mueller. Y, por supuesto, el peligro en todo esto, además del riesgo obvio de politizar el proceso de inteligencia, es que le daría a la Casa Blanca el mensaje de que puede despedir a Rod Rosenstein y puede despedir a Bob Mueller, y hay miembros del Partido Republicano que están tan investidos en esta presidencia que lo van a permitir. Y eso causaría una crisis constitucional, si ese es el mensaje que se obtiene de todo esto”.
El congresista Schiff dijo más adelante que el presidente del comité, Devin Nunes, había hecho “cambios sustanciales” a una versión del memorándum que envió a la Casa Blanca, y que los cambios no habían sido aprobados por el comité.
Inicio