En Chicago, un nuevo análisis de cientos de muestras de agua potable encontró plomo tóxico en casi el 70% de los hogares de la ciudad, donde tres de cada 10 muestras excedían el nivel máximo permitido por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por su sigla en inglés). El periódico The Chicago Tribune informa que la contaminación se debe a las cañerías de servicio de plomo utilizadas en toda la ciudad hasta que el Congreso prohibiera la práctica en 1986. El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, declaró que es responsabilidad de los propietarios, no de la ciudad, reemplazar las cañerías que conducen el agua a sus propiedades.
El agua del 30% de los hogares de Chicago muestra niveles de plomo tóxico superiores al límite permitido por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.
Titular13 Abr. 2018