El exalcalde de la ciudad de Nueva York y candidato presidencial para el año 2020 Michael Bloomberg ha sido objeto de críticas generalizadas después de que el medio The Intercept revelara que utilizó mano de obra de la prisión para hacer llamadas de campaña. La campaña de Bloomberg subcontrató a la compañía de centros de llamadas ProCom para hacer sus llamadas para la campaña presidencial del 2020. Dos de los centros de llamadas de ProCom son operados en prisiones estatales en Oklahoma. Bloomberg afirmó que no estaba al tanto del trabajo de los presos hasta que The Intercept reveló la noticia, y que desde entonces ha cortado su vínculo con la compañía.
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