El lunes, en el estado de Tennessee, Estados Unidos, el gobernador republicano Bill Lee asistió a una reunión de asistencia obligatoria para los trabajadores de una fábrica de Volkswagen en la ciudad de Chattanooga, en la cual instó a los asistentes a votar en contra de unirse a un sindicato en una elección programada para mayo. Los medios locales no fueron informados sobre la visita del gobernador a la planta, y se excluyó a los reporteros de la reunión; no obstante, una grabación obtenida por el medio Labor Notes revela que el gobernador se alió firmemente con los directivos de Volkswagen y en contra de la sindicalización.
El gobernador Bill Lee afirmó: “Cada lugar de trabajo tiene desafíos, y hay cosas en su lugar de trabajo que desearían que fueran diferentes. Mi experiencia es que cuando tengo una relación directa con usted, el trabajador, y usted trabaja para mí, ahí es cuando el ambiente laboral funciona mejor. Eso es lo que creo.”
Los comentarios del gobernador Lee provocaron tanto aplausos como abucheos por parte de los empleados de Volkswagen. En la elección que tendrá lugar en mayo, más de 1.700 trabajadores que trabajan por hora en la planta de Chattanooga podrían unirse al sindicato United Auto Workers, luego de que, en 2014, una campaña similar fracasara por un estrecho margen.