Malasia enviará hasta 3.000 toneladas de residuos plásticos a los países de donde provinieron, en un intento por evitar que las naciones más adineradas continúen desechando su plástico usado bajo la apariencia de reciclaje. Malasia se convirtió en el principal vertedero de desechos plásticos del mundo después de que China prohibió su importación el año pasado. El plástico es contrabandeado a plantas de reciclaje no autorizadas desde países entre los que se incluyen Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Canadá y Australia, y está causando problemas medioambientales en las comunidades aledañas. Estas son las palabras de la ministra de Energía de Malasia, Yeo Bee Yin.
Yeo Bee Yin afirmó: “Lo que los ciudadanos del Reino Unido creen que envían para reciclar es de hecho descartado en nuestro país. Los malayos, como cualquier otro país en desarrollo, tienen derecho al aire limpio, al agua potable, a los recursos sostenibles y a un medio ambiente limpio en el que vivir, al igual que los ciudadanos de países desarrollados”.