La presidenta de Planned Parenthood sostiene que están siendo obligados a poner fin al programa de planificación familiar financiado por el Título X

En Estados Unidos, Planned Parenthood se verá forzado a retirarse la próxima semana del programa gubernamental conocido como Título X, el cual financia servicios de planificación familiar para personas de bajos ingresos, a menos que un tribunal federal bloquee una normativa promulgada por el Gobierno del presidente Donald Trump que prohíbe la financiación federal para cualquier organización que ofrezca abortos o derive pacientes para la práctica de abortos. Trump ordenó dichos cambios radicales al Título X en febrero, y recientemente el Departamento de Salud y Servicios Sociales ordenó a todos los beneficiarios del Título X firmar antes del 19 de agosto una declaración en la que se comprometen a cumplir con la normativa. Planned Parenthood afirma que se negará a cumplir con la orden. En un comunicado, la presidenta en funciones de la organización, Alexis McGill Johnson, sostuvo: “A menos que el Noveno Circuito intervenga, esta ‘ley mordaza’ destruirá el programa Título X, poniendo en riesgo el control de la natalidad, las pruebas de detección de cáncer de mama y cuello uterino, y las pruebas y el tratamiento de enfermedades de transmisión sexual de millones de personas que luchan para llegar a fin de mes”.