El martes, la Corte Suprema dictaminó que el Gobierno de Donald Trump puede ordenar a la Oficina del Censo que detenga su conteo del año 2020 un mes antes de lo planificado, lo que supone un gran golpe para los grupos de derechos civiles. Los activistas argumentan que la decisión llevará a que se considere una cantidad mucho menor de inmigrantes y comunidades de color, lo que tendrá repercusiones considerables para los derechos electorales y la asignación justa de fondos federales. La jueza Sonya Sotomayor, quien fue la única que disintió de la decisión, escribió: “Los daños causados por apresurar el conteo del censo de este año son irreparables. Y los encuestados sufrirán su impacto perdurable que los afectará durante al menos los próximos 10 años”.
La Corte Suprema permitirá que el Gobierno de Trump detenga el conteo del censo con un mes de anticipación
Titular14 Oct. 2020