En el estado de California, los desarrolladores de aplicaciones de transporte, liderados por Uber y Lyft, han tenido éxito en su campaña de 200 millones de dólares para evitar que los trabajadores autónomos de la economía del trabajo esporádico se conviertan en empleados y reúnan los requisitos para recibir beneficios y protecciones laborales. La aprobación de la Propuesta 22 por parte de los votantes de California representa una dura derrota para las organizaciones sindicales. La organización Human Rights Watch se opuso a la iniciativa electoral y publicó un video en el que instaba al pueblo a votar “no”.
Video de Human Rights Watch: “Las empresas de la economía del trabajo esporádico clasifican a los trabajadores como contratistas independientes en lugar de empleados. Eso les permite eludir las protecciones laborales federales y estatales, ya que los contratistas independientes no obtienen protecciones de salario mínimo, paga por enfermedad garantizada ni la capacidad de afiliarse a un sindicato. Las empresas que ofrecen trabajo autónomo tampoco pagan el seguro social o Medicare en nombre de los trabajadores que clasifican como contratistas independientes”.
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