El precandidato presidencial Joe Biden pidió el jueves que se flexibilicen las sanciones contra Irán para frenar la propagación de COVID-19, que ha golpeado un sistema de salud que ya estaba devastado por las sanciones estadounidenses antes de que comenzara la pandemia. El oponente de Biden, el senador Bernie Sanders, ha pedido por mucho tiempo que se ponga fin a las sanciones contra Irán, y a principios de esta semana Sanders participó junto a otros 33 legisladores en una carta que se envió al secretario de Estado Mike Pompeo exigiendo que permita embarques de asistencia humanitaria en Irán. En la Casa Blanca, la corresponsal del canal Al Jazeera Kimberly Halkett interrogó al presidente Donald Trump sobre las sanciones contra Irán.
Kimberly Halkett: “¿Usted consideraría flexibilizar las sanciones para permitir la entrada de suministros médicos?”.
Presidente Donald Trump: “Bueno, ni siquiera nos han pedido que hagamos eso”.
Kimberly Halkett: “Pero sabemos que las sanciones afectan a la gente, no al Gobierno”.
Presidente Donald Trump: “¿Sabe qué? Ni siquiera nos han pedido que lo hagamos”.
De hecho, las autoridades iraníes han exigido en repetidas ocasiones que Estados Unidos levante las sanciones, y el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Javad Zarif, las condenó calificándolas de una “campaña de terrorismo económico”. El miércoles, Trump volvió a amenazar con atacar a Irán, alegando en un tuit que se enteró de los planes iraníes de realizar un “ataque sorpresa” contra las fuerzas estadounidenses en Irak.