El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas votó a favor de cerrar una investigación por crímenes de guerra sobre la guerra saudí respaldada por Estados Unidos en Yemen. Varios países europeos querían que la investigación continuara durante otros dos años, pero Arabia Saudí ejerció una fuerte presión para impedir esa resolución. El Instituto de Estudios de Derechos Humanos de El Cairo afirmó que la votación constituyó “un intento flagrante de Arabia Saudí y sus aliados para garantizar una impunidad absoluta para ellos después de haber sido vinculados a crímenes de guerra y a otras violaciones graves del derecho internacional en Yemen”. John Fisher, de la organización Human Rights Watch, había instado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a respaldar la investigación sobre crímenes de guerra.
John Fisher: “No renovar la investigación cuando todavía se necesita con urgencia sería una mancha en la credibilidad del consejo y una bofetada a las víctimas. En lugar de ceder a la presión de cualquiera de las partes en el conflicto que busca evadir el escrutinio de sus propios abusos, los miembros del Consejo de Derechos Humanos deben apoyar al pueblo de Yemen y permitir que continúe la investigación de los expertos en este momento crítico”.
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