En la zona ocupada por Israel de Jerusalén Oriental, cuatro familias del barrio de Sheikh Jarrah rechazaron oficialmente un acuerdo propuesto por la Corte Suprema de Israel que retrasaría su desalojo, pero que las obligaría a ceder la propiedad de sus viviendas y a pagar un alquiler a los colonos israelíes que reclamaron los hogares. Estas fueron las palabras expresadas por la activista y residente afectada de Sheikh Jarrah, Muna El-Kurd.
Muna El-Kurd: “Rechazamos [el acuerdo] porque creemos en nuestra causa y derecho a habitar nuestro hogar y nuestro país, a pesar de que no tenemos garantía alguna, de ninguna de las partes ni de ninguna organización, que respalde nuestra firmeza como palestinos de permanecer en la zona ocupada de Jerusalén en la que vivimos”.
Como resultado del rechazo al acuerdo, la Corte Suprema de Israel podría ordenar el desalojo de las familias dentro de unas semanas. En mayo, las expulsiones planificadas contribuyeron a desencadenar la reciente guerra en Gaza y generaron apoyo internacional para las familias palestinas, a las que grupos de colonos y el Estado israelí intentan desalojar.
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