Los Archivos Nacionales de Estados Unidos le han pedido al Departamento de Justicia que investigue el manejo de los registros de la Casa Blanca por parte del expresidente Donald Trump. Esto ocurre luego de que los funcionarios de dicha institución recuperaran 15 cajas de documentos que Trump se había llevado a su resort Mar-a-Lago en lugar de devolverlos al Gobierno federal. Según el periódico The Washington Post, estos documentos incluyen archivos que estaban claramente marcados como clasificados y varios de ellos estaban etiquetados como “ultrasecretos”. Cuando el FBI investigó a la ex secretaria de Estado de Estados Unidos Hillary Clinton en 2016 por posible manejo inadecuado de información clasificada, Trump encabezó las consignas que sus partidarios coreaban durante los actos de campaña en los que pedían el encarcelamiento de Clinton. No está claro si el FBI abrirá una investigación similar sobre el manejo inadecuado de registros por parte de Trump.
Mientras tanto, los investigadores del comité de la Cámara de Representantes de Estados Unidos que investiga la insurrección del 6 de enero de 2021 han encontrado lagunas en los registros telefónicos oficiales de la Casa Blanca correspondientes al día de la insurrección. Las brechas en los registros abarcan un período de tiempo durante el ataque al Capitolio en el que se sabe que Trump estuvo haciendo llamadas telefónicas.