En Somalia, al menos cinco personas han muerto, incluidos dos menores, después de que combatientes del grupo al-Shabab atacaran varias estaciones de policía y puestos de seguridad en la capital, Mogadiscio.
Esto se produce al tiempo que la ONU advierte que, debido a la grave sequía que afecta el país, es probable que casi la mitad de todos los niños y las niñas menores de cinco años sufran de desnutrición aguda este año. Según la ONU, cientos de miles de niños necesitan tratamientos para mantenerse con vida, y la organización hizo un llamado para que se tomen medidas urgentes a fin de prevenir una situación catastrófica de hambruna.