En Estados Unidos, al menos dos fiscales de distrito de los condados más grandes del estado de Texas afirmaron que se negarán a cumplir con la orden del gobernador republicano Greg Abbott de investigar los casos de atención médica relacionada con la afirmación de género para jóvenes trans como “abuso infantil”. La directiva de Abbott a las agencias estatales sostiene que los progenitores de niños y niñas transgénero que reciben una atención que a menudo ayuda a salvar vidas deben ser investigados. La orden también dispone que cualquier persona, incluidos docentes, médicos y personal de enfermería, que no informe sobre dichos tratamientos a las autoridades podría enfrentar responsabilidad penal. Varios grupos de defensa de los derechos humanos, organizaciones médicas y familias criticaron este nuevo ataque de las autoridades del estado de Texas contra jóvenes de la comunidad LGBTQ+. En 2021, Texas se unió a otros estados liderados por republicanos para prohibir que la juventud transgénero participe en competencias deportivas de centros educativos.
A principios de febrero de 2022, la gobernadora republicana de Dakota del Sur, Kristi Noem, promulgó una ley similar para los y las atletas trans de ese estado. Noem fue duramente criticada esta semana cuando se negó a reconocer cómo la legislación contra la comunidad trans estaba afectando a sus propios electores.
Kyle Ireland: “Circula actualmente una estadística que indica que el 90% de la comunidad LGBTQ de Dakota del Sur está diagnosticada con ansiedad o depresión. ¿Por qué cree que esto es así?”.
Gobernadora Kristi Noem: “No sé. Eso me entristece, y deberíamos averiguarlo”.
Mientras tanto, el nuevo proyecto de ley contra la comunidad LGBTQ del estado de Florida, denominado “No digas gay” (Don’t Say Gay), ha avanzado en el proceso de aprobación en la Cámara de Representantes del estado y se prevé para este jueves una votación final al respecto. El proyecto de ley prohibiría hablar sobre orientación sexual e identidad de género en las escuelas de Florida.
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