Las fuerzas armadas de Ucrania afirman que han recuperado varias localidades que habían sido tomadas por Rusia, incluida la ciudad de Irpin, un suburbio estratégico ubicado en las afueras de la capital, Kiev. Mientras tanto, el alcalde de Mariúpol anunció que casi 5.000 residentes, incluidos 210 menores, han muerto durante los ataques rusos en la ciudad sitiada, que albergaba a casi medio millón de personas antes de la invasión de Rusia. El lunes, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, hizo un llamado a que se declare un alto el fuego de inmediato.
Secretario general António Guterres: “El cese de las hostilidades permitirá que se proporcione ayuda humanitaria esencial y que los civiles puedan trasladarse con seguridad. Salvará vidas, evitará el sufrimiento y protegerá a los civiles”.