Dos misiles de crucero rusos impactaron este jueves en un edificio residencial de gran altura en la ciudad de Kiev, dejando diez personas heridas. Este es el primer ataque de Rusia contra la capital de Ucrania en casi dos semanas. La ofensiva se produjo pocas horas después de que el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, recorriera algunas zonas de Kiev devastadas por la guerra, y solo minutos después de que este concluyera una conferencia de prensa conjunta con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky. Zelensky afirmó que el momento elegido por Rusia para llevar a cabo los ataques con misiles muestra que su intención era humillar a las Naciones Unidas (ONU) y todo lo que ella representa. Guterres reiteró el llamado de la ONU a un alto el fuego y dijo que su prioridad es garantizar que Rusia y Ucrania establezcan corredores de evacuación y ayuda humanitaria en Ucrania que sean realmente seguros.
Secretario general António Guterres: “Ucrania es actualmente un epicentro de angustia y dolor insoportables. Eso lo presencié hoy muy vívidamente en Kiev: pérdida de vidas sin sentido, destrucción masiva, violaciones inaceptables de los derechos humanos y de las leyes de la guerra. Es fundamental que la Corte Penal Internacional y otros mecanismos de la ONU realicen su trabajo para que los responsables rindan cuenta de sus actos”.
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