En Ucrania, al menos 39 personas murieron y unas 100 resultaron heridas este viernes en un ataque con misiles contra una abarrotada estación de tren en la ciudad de Kramatorsk, al este del país. Cuatro de los muertos eran menores de edad. Las autoridades ucranianas acusaron a Rusia de atacar deliberadamente a civiles que intentaban huir de la intensa ofensiva rusa en la región. Rusia ha negado cualquier responsabilidad en el ataque.
Por su parte, el portavoz del Kremlin ha reconocido por primera vez que las fuerzas armadas rusas han sufrido pérdidas significativas. Dmitry Peskov habló con el canal británico Sky News.
Mark Austin: “Han perdido miles de soldados. ¿Cuántos han perdido?”.
Dmitry Peskov: “Sí, tenemos bajas significativas, y es una gran tragedia para nosotros”.