La crisis humanitaria en Gaza continúa agravándose a medida que Israel prosigue, por sexto día consecutivo, su ofensiva militar con bombardeos aéreos y de artillería en el asediado territorio palestino y reduce barrios enteros a escombros. El Ministerio de Salud de Gaza afirma que los ataques israelíes han matado a más de 1.350 palestinos y que más de 6.000 han resultado heridos. Entre los muertos hay más de 320 niños y niñas. Las personas sobrevivientes buscan sus pertenencias perdidas y alimentos entre los escombros de sus viviendas.
Azaam Shamiya: “Salimos de nuestras casas pensando que íbamos a volver en una hora. Dejamos nuestras pertenencias, dinero, comida y todo lo que teníamos. Ahora 50 personas se encuentran sin hogar, sin acceso a alimentos, bebida, agua o electricidad. No sé cómo vamos a proporcionarles comida a nuestros hijos. Estoy buscando restos de lentejas y arroz entre los escombros, aunque sea un poco, para darles a mis hijos”.
El ministro de Energía de Israel afirmó que no se permitirá el ingreso a Gaza de recursos esenciales ni de ayuda humanitaria, incluida el agua, hasta que la organización Hamás libere a los rehenes que tomó en el ataque del sábado. La advertencia del ministro israelí se produjo después de que la única central eléctrica de Gaza se quedara sin combustible, lo que sumió al enclave palestino en la oscuridad. El Comité Internacional de la Cruz Roja advirtió en un comunicado: “Si Gaza se queda sin electricidad, los hospitales se quedan sin energía, lo que pone en riesgo [la supervivencia de] los recién nacidos que están en incubadoras y de los pacientes de edad avanzada que dependen de suministros de oxígeno. Las diálisis renales dejan de realizarse y no se pueden tomar radiografías. Sin electricidad, los hospitales podrían convertirse en morgues”. La agencia de la ONU para los refugiados palestinos informa que al menos 340.000 palestinos han tenido que abandonar sus hogares en toda la Franja de Gaza. La agencia también reporta que, desde el sábado, los ataques israelíes han causado la muerte de nueve miembros del personal de la ONU y que los bombardeos han ocasionado daños en 18 escuelas que están siendo utilizadas como refugios improvisados. La sede de esa agencia de la ONU en la ciudad de Gaza también resultó dañada por un ataque israelí.
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