El Departamento de Defensa de Estados Unidos afirma que dos aviones de combate estadounidenses bombardearon este miércoles un depósito de municiones utilizado por milicias respaldadas por Irán en el este de Siria. El ataque aéreo reportado se produce luego de una serie de ataques con drones y misiles contra personal militar de Estados Unidos apostado en Irak y Siria. Esta semana, el Pentágono informó que 46 militares estadounidenses desplegados en esos países resultaron heridos durante el último mes. Los rebeldes hutíes de Yemen afirmaron el jueves haber derribado un dron estadounidense que sobrevolaba el mar Rojo y haber disparado una serie de misiles de largo alcance contra Israel. Un portavoz de los hutíes dijo que llevarán a cabo más ataques hasta que Israel detenga su ofensiva contra los palestinos. En París, el secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, advirtió el jueves que el ataque de Israel contra Gaza está a punto de desencadenar una guerra de mucho mayor alcance en todo el Medio Oriente.
Martin Griffiths: “La guerra, de hecho, es un virus que siempre quiere expandirse. Y el conflicto actual es como un reguero de pólvora que podría extenderse y consumir toda la región. Cuando veamos lo que puede suceder en el futuro, pensaremos que estos han sido días tranquilos”.