En el estado de Georgia, dos ex funcionarias electorales, las afroestadounidenses Ruby Freeman y su hija Shaye Moss, han demandado por segunda vez al exabogado de Trump, Rudy Giuliani. El viernes, un jurado federal ordenó a Giuliani pagar a Freeman y Moss 148 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios tras acusarlas falsamente de haber manipulado las papeletas durante las elecciones presidenciales de 2020, lo que provocó que las mujeres sufrieran acoso y amenazas de muerte por parte de simpatizantes de Trump. A través de la nueva demanda, las dos mujeres buscan obtener una orden judicial que prohíba para siempre a Giuliani volver a difamarlas.
Mientras tanto, un panel de un tribunal federal de apelaciones rechazó una solicitud del ex jefe de gabinete de Trump Mark Meadows para que se traslade a un tribunal federal un caso que enfrenta en el estado de Georgia por intentar revocar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.