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Una nueva investigación revela que los implacables ataques aéreos con los que comenzó la operación israelí, que ya ha provocado la muerte de casi el 1% de la población de Gaza, fueron lanzados con poca información de inteligencia sobre la ubicación de los rehenes tomados por Hamás. El periodista de Jerusalén Yuval Abraham, autor de la investigación, explica que las fuerzas armadas decidieron que los rehenes “simplemente no eran una prioridad”, sino que relegaron su seguridad “en pos de la ejecución de esta campaña de bombardeos”. En estos momentos, hay una creciente presión sobre el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para que garantice la liberación de la gente que aún permanece secuestrada por Hamás, después de que el ejército israelí matara por error a tres rehenes israelíes que habían logrado escapar de su cautiverio en el norte de Gaza. Abraham describe la “escandalosa” diferencia entre el modo en que los grandes medios de comunicación cubrieron la muerte de estos rehenes israelíes y el modo en que cubrieron la muerte de personas civiles palestinas a manos de las Fuerzas de Defensa Israelíes. “Realmente, el eje de mucho de lo que está sucediendo es esta disparidad entre el valor que se le otorga a la vida de ciertas personas y el poco valor que se da a la vida de otras personas en amplios sectores de Israel y Occidente”.
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